La geografía sentimental de Barbastro -descripción de Harry Gómez- ha perdido a uno de los protagonistas genuinos, propios de la historia taurina local. La muerte de Eduardo Peruga Puy deja una estela popular propia de quien fue alguacilillo en la Plaza de Toros, aficionado taurino y escudero de “el Pregonero del Vero” con Emilio Fajarnés. En los años 50, compartió cartel en “extraordinarias becerradas” en la Plaza de Toros con veteranos como “Carbonerito” y “Perguin” y “El Niño del Portillo” en las Fiestas del Barrio de san Joaquín. En otras becerradas peñistas, Eduardo Peruga “Peruguita” hizo el paseíllo con Víctor Román “Ferranquita”, Manolo González “El manoletino”, Cosme Arcas “El maravillas”, Sebastián Arregui “El Chano” y otros diestros locales. En las Fiestas del año 2006 “se cortó la coleta” en la becerrada que organizó la Peña Ferranca. Además, Peruga fue miembro de la Peña “El Cachirulo”, directivo en el Hogar de Mayores y barbastrense en todo momento. En su recuerdo, se rescata la caricatura que le hizo su buen amigo Amado Berdejo en los años 60, uno de los carteles y las últimas fotos de la tarde que dio los últimos pases a la becerra con sabor ferranquero, tras participar en el paseíllo desde “el Cortés” hasta la Plaza de Toros. Eduardo está entre los que más orejas “ajenas” ha cortado por su labor de alguacilillo.