La ciudad de Barbastro y el cuerpo de la Benemérita están conmocionados por la trágica muerte de un Guardia Civil de Tráfico en acto de servicio, José Antonio Pérez de 54 años, en la tarde noche de ayer mientras realizaba un control rutinario. El coche al que paró, en el que viajaban cinco ocupantes, fue detenido para proceder a un control de identificación en la denominada rotonda de los cuarteles, que da acceso a Barbastro. Al parecer y según ha trascendido -ya que la confusión y ausencia de noticias oficiales está siendo la tónica en este caso-, el agente les pidió a los cinco ocupantes la documentación. En ese momento uno de ellos lo agarró del brazo y el conductor se dio a la fuga por el carril de acceso a la N – 240 en dirección Huesca. El agente fue arrastrado varios metros y sufrió heridas graves que le provocaron la muerte en el acto. El cuerpo ya sin vida cayó desplomado en el firme de la N – 240.
Mientras el coche con los agresores, un Opel Astra de color blanco, se dio a la fuga y durante su huída chochó contra un turismo, Audi, que viajaba en dirección contraria, también con cinco ocupantes, un matrimonio y sus tres hijos, que afortunadamente no sufrieron heridas de consideración.
La nacional 240 estuvo cortada durante varias horas. Hasta el lugar de los hechos acudió el alcalde de Barbastro, la subdelegado del Gobierno y el teniente coronel de la Guardia Civil.
El vehículo a la fuga se dirigió a Barbastro. Allí, los ocupantes se dispersaron a pie. Tres de ellos fueron localizados por la Guardia Civil tras una intensa operación y los condujeron al Cuartel de la Guardia Civil. Se desconoce el paradero de los otros dos.
En las redes sociales y por whatsapps circulaban todo tipo de informaciones, y un sentimiento de consternación generalizado.
La capilla ardiente se instalará en el Ayuntamiento de Barbastro a las 19.00 y mañana será el funeral.
D.E.P.
