El pabellón Los Olímpicos de Monzón vivió ayer una jornada para la historia deportiva local, el enfrentamiento entre dos titanes del baloncesto europeo como son el F.C. Barcelona y el F.C. Zenit San Petersburgo. Los blaugranas festejaron la Diada con una pírrica victoria 63 a 31 que bien podría haber sido rusa si llega a entrar el triple que sobre la bocina intentó el Zenit.
Partido típico de pretemporada, muy igualado con dos cuartos para cada conjunto (los primeros para el Zenit y los finales para el Barça) y con un tanteo muy bajo, propio de los desajustes del inicio de los entrenamientos pero también por las fuertes defensas que ambos conjuntos aplicaron.
Quizás el resultado fue lo de menos tanto para los dos conjuntos que acaban de iniciar su rodaje antes de jugar sus respectivas ligas nacionales y continentales. Y tampoco importó a los 1.500 aficionados, llegados de varias localidades, que llenaron el pabellón, en una cita deportiva del más alto nivel, nunca antes vista en la capital del Cinca Medio. El pabellón se quedo pequeño.
El partido se enmarcó en el Trofeo San Mateo, que sumaba su octava edición, y que sirvió para calentar los motores de la fiesta mayor de Monzón. Mientras que para los dos conjuntos ha constituido una buena piedra de toque ya que los blaugranas se presentaban con muchas novedades, también en el banquillo. Por su parte, el Zenit recaló en Monzón desde Lituania y el de ayer constituye el primero de una serie de partidos que va a disputar en España en los próximos quince días para preparar la Eurocup.
Por el parqué montisonense desfilaron las estrellas culés como el pivot Tomic, los aleros Peno, Koponen y Oleson, el base Rice o el medallista olímpico Claver, laureado fichaje nacional, que regresó con garra de Brasil. Se echó en falta a la ‘bomba’ Navarro, de vacaciones tras su participación en las Olimpiadas.
Los catalanes tuvieron en frente, una escuadra compuesta por lo más granado de la elite juvenil rusa, bien apuntalada por el serbio Markovic (medalla de plata en los Juegos de Brasil) o el norteamericano Toolson, ambos ex de Unicaja Malaga, o el finés Timma, máximo anotador del partido con 16 puntos.
El alcalde Álvaro Burrell y el concejal de Deportes Miguel Aso se encargaron de entregar los trofeos a los respectivos capitanes al terminar el choque. El alcalde se mostró satisfecho «por el espectáculo. En Monzón el deporte siempre vende y el Barça es mucho Barça. El pabellón ha lucido como nunca y hemos puesto el listón muy alto».
