
“Con Motastro se pretendía devolver el ambiente motero a Barbastro y se ha conseguido con creces”, asegura Sergio Broto, organizador del evento. Todas las expectativas de los organizadores se han visto cumplidas en un evento que desde las 9 de la mañana del domingo consiguió llenar el recinto Ferial de motos, almuerzos, música y muy buen ambiente.
Muchos clubes moteros de la zona y provincias vecinas habían confirmado su visita a Motastro por lo que se esperaba una alta participación, pero 30 minutos después de abrir las puertas al público la organización se vio obligada a duplicar el espacio de aparcamiento reservado a las motos ya que se había quedado pequeño, y esta operación se repitió otra vez más hasta llenar toda la explanada y parte del interior del recinto de la institución ferial.
La Peña Somon Más de Barbastro, a través de su sección de Motoclub, era la organizadora del evento en el que se repartieron más de 400 almuerzos compuestos por dos huevos fritos, longaniza, panceta y Tomate Rosa de Barbastro.

Uno de los puntos fuertes del evento fue la exposición de motos clásicas procedentes en su mayoría de coleccionistas privados que centraron la atención de los visitantes antes o después del almuerzo. Se pudieron ver 40 motos entre las que destacaba una Velocette de 1927, una Derby Ron (Replica Ángel Nieto) de 1971 o una BMW K75 de 1942 que es un modelo militar utilizado en la II Gerra Mundial y lucía equipado con sidecar y ametralladora en la exposición.
La organización estima que pasaron por Motastro más del millar de personas entre moteros y visitantes a la exposición, lo que se valora como un gran éxito para ser la primera edición y plantea la posibilidad de que el evento se repita el año que viene. Las palabras de apoyo recibidas, especialmente por moteros veteranos de la localidad durante la jornada constituyen uno de los principales motivos para que Motastro se plantee como una cita anual.