Los habituales corredores de carreras de montaña Alejandro Castarlenas y Fernando Latorre han recorrido 140 kilómetros entre Barbastro y Roda de Isábena en menos de 24 horas a lo largo del fin de semana. El evento ha tenido el objetivo de continuar la religiosa tradición de la ermita de San Ramón y ha tenido una motivación deportiva y solidaria, pues ha finalizado con 140 kilos de alimentos que se donarán a Cáritas Diocesana.
La salida de la actividad ha tenido lugar este pasado sábado. Los dos corredores partieron del establecimiento barbastrense Julián Marial a las 20.00 horas. A su paso, transcurrieron por el antiguo camino del exilio de San Ramón, el cual fue recuperado por el investigador Daniel Vallés, quien ha escrito un libro en el que incluye la novedad de incluir la localidad de Estadilla en el recorrido.
En torno a las 7.30 horas del domingo, los corredores llegaron a Roda de Isábena. Ambos fueron recibidos por el párroco Aurelio Ricou y tuvieron la oportunidad de descansar y visitar la cripta de San Ramón. Una vez llegados a este punto, el siguiente objetivo fue regresar a la ermita de Barbastro.
El domingo en torno a las 21:45 fue cuando se completó la gesta. Un gran grupo formado por amigos, la priora de la cofradía de San Ramón, el presidente del club Montañeros de Aragón Barbastro, José Masgrau, Elita Davias, el obispo Ángel Pérez, el párroco de Roda de Isábena y el alcalde Fernando Torres, junto a concejales de la Corporación municipal, recibieron entre calurosos aplausos a lo corredores.
En cuanto a sus valoraciones, consideran que uno de los tramos más exigente fueron los últimos 15 kilómetros de Costean y otro tuvo lugar en Graus, tras tener que dar un rodeo de 20 minutos ya que la pasarela para cruzar el río Ésera estuvo deshabilitada. Por último, añaden que, además de tener un objetivo solidario y deportivo, quieren promocionar esta desconocida ruta como atractivo turístico, deportivo o de religiosidad popular.