El servicio de suministro de agua potable de Monzón es el más barato de los que prestan las ciudades aragonesas de similar entidad. En números redondos, el recibo semestral por un consumo de 50 metros cúbicos se sitúa en 17 euros (la media de otras localidades supera los 25). El Ayuntamiento recauda el 50 por ciento de gasto real (el primer concepto se eleva a 318.000 euros y el segundo a 618.000). En el último lustro, las tarifas del agua no han experimentado incremento alguno, y el servicio ha mejorado notablemente con la entrada en funcionamiento de la planta potabilizadora construida por el Instituto Aragonés del Agua junto al depósito de la Valle Tamarite.En Monzón tampoco se cobra por el mantenimiento del contador ni por el del alcantarillado (en algunas ciudades sí y en otras no). El recibo del agua, no obstante, ha subido en este tiempo porque incluye el canon de saneamiento destinado a sufragar los gastos de mantenimiento de la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR). El Ayuntamiento actúa de mero intermediario: cobra el canon y lo remite a la DGA. A medio plazo se prevé realizar trabajos para mejorar el “rendimiento” de la red, que consistirán en la localización y reparación de fugas, la sustitución de elementos obsoletos y la instalación de contadores donde nos los haya.