El Museo de Zaragoza es la sede de la exposición “Goya, artista en el grand tour”. Se trata de una muestra temporal que completa la información publicada hasta este momento sobre la estancia de Goya en Italia (1769-1771) que organizan el Gobierno de Aragón y la Diputación de Zaragoza.
El “Cuaderno italiano”, adquirido por el Museo del Prado, es un cuaderno de notas manuscritas que alternan apuntes de figuras e incluso con copias de composiciones, tomadas del natural durante la estancia de Goya en Italia.
Precisamente en esta exposición es donde habita el influjo del somontanés de Barbuñales, político, diplomático y mecenas José Nicolás de Azara, en aquel entonces Agente General de Preces en Roma, posteriormente embajador de España por un total de 32 años más dos no consecutivos en Paris.
Azara fue crucial para el desarrollo formativo que tuvo Goya en Italia, la aparición de este cuaderno da luz a algunas interrogantes respecto a pinturas y murales en los que Goya participo en los dos años que duro su estancia en Italia.
Goya, un joven aragonés que se fue a la aventura a buscarse la vida a Italia con un petate y una carta manuscrita dirigida a José Nicolás de Azara.
Fue el diplomático José Nicolás de Azara quien presento a Francisco de Goya y Antón Rafael Mengs, siendo este amigo y admirador de Mengs desde la anterior época que habían coincidido en Madrid años 61 a 64.
Esta relación de Antón Raphael Mengs con Francisco Goya se remonta a la época en que el rey Carlos III concedió el primer permiso a Mengs, primer pintor de la corte, para regresar a Roma a causa de su débil salud (1771-1774). Este hecho revela las claras influencias de Mengs en las obras del pintor de Zaragoza según Cinelli.
Mengs pintó a su amigo José Nicolás de Azara y la obra está expuesta en el Museo del Prado.
Asimismo Goya pinta al ingeniero naturalista Félix de Azara, penúltimo de los siete hermanos que componían esta ilustrada familia de Barbuñales, 20 años más joven que Nicolás. Dicha obra puede contemplarse en el Museo Goya de Zaragoza.
Goya participa en el concurso de la Academia de Parma con su versión de Aníbal vencedor, que por primera vez miró Italia desdelos Alpes (Fundación Selgas-Fagalde, Cudillero, Asturias), enviada desde Roma y por la que recibe una mención especial.
Durante su última estancia en España, 1774- 1777, Mengs pide a Goya que se traslade a Madrid para trabajar en la Real Fábrica de Tapices de Santa Bárbara bajo su dirección y del arquitecto Francisco Sabatini.
El rey Carlos III durante su reinado (1759-1788) hizo que España se involucrara en el proceso de modernización de la Ilustración, aunque algo de retraso respecto a Europa.
En dos ocasiones Mengs aceptó invitaciones de Carlos III para ir a Madrid. Allí produjo algunos de sus mejores trabajos, especialmente el techo del salón de banquetes del Palacio Real de Madrid, cuyo tema fue el triunfo de Trajano y el templo de la gloria.
Después de la finalización de esta obra en 1777, regresó a Roma donde murió en malas circunstancias, dejando a veinte niños, siete de los cuales fueron pensionados por el rey de España, supuestamente a propuesta de Azara.
Presumimos con orgullo de la considerable fama que algunos de estos personajes gozaron en su época y evidencia la actual escasez en Aragón de personajes o cargos políticos influyentes, tanto en la política nacional como en la internacional.
¿Cuál habría sido el destino de Goya?
si buscándose la vida en Italia,
con Azara no se hubiera topado
y convertido en su mentor.
Si en aquella Italia se hubiera instalado,
Roma tendría más esplendor
España, habría perdido su legado.
Extracto del libro Acervo Circular.