yo soy

Todos de niños hemos estado conectados al potencial de amor ilimitado que somos. Sin embargo, a medida que crecemos, en torno a los tres años nos vamos desconectando de nuestra esencia.

Una vez desconectados, cuando sentimos que el exterior nos falla (nuestros padres, abuelos, adultos de referencia…) se apodera de nosotros la angustia, un vacío profundo emocional.

Una vez desconectados y angustiados, comenzamos a grabar en nuestro subconsciente programas mentales de no valgo, no soy suficiente, no merezco, no soy lo suficientemente bueno…

Creemos que somos imperfectos, incompletos y que por ello necesitamos ser muy buenos para que nos quieran. Otros creen que han de ser fuertes o necesitan acorazar su corazón para no sufrir.

En cualquiera de los casos dejamos de ser nosotros mismos para agradar, complacer, cumplir las expectativas del exterior… Sin darnos cuenta nos disfrazamos de un personaje con el que tarde o temprano acabamos identificándonos.

Por ello cuando realizamos un trabajo de introspección llega un momento en el que no sabemos quienes somos.

Sentimos que cuanto más trabajamos en nosotros mismos menos nos conocemos, si ese es tu caso he de decirte que vas por el buen camino, has de dejar atrás todo lo que creíste que eras para encontrarte de nuevo.

El amor por nosotros mismos es el poder que nos sana y es justo cuando conectamos con nuestro centro de amor y lo desarrollamos cuando dejamos de buscar fuera.

Por fin hemos comprendido que todo lo que anhelábamos ya lo éramos, solo que nos habíamos olvidado de ello.

Sal de Ronda
GOB ARAGON surge
SUSCRIPCION
gobierno de aragón

Dejar respuesta

Please enter your comment!
Please enter your name here