El gran escaparate de todos los años. La riqueza cultural y natural de la Comunidad de Aragón ha vuelto a lucirse en la Feria Internacional de Turismo (Fitur) que ha tenido lugar en Madrid el pasado fin de semana. En esta ocasión, la puesta de largo aragonesa ha contado con un espacio de quinientos metros cuadrados, basando su temática en cuatro bloques que vertebran la identidad y el atractivo de la zona como destino turístico. Todos ellos, reconocidos incluso por la Unesco como Patrimonio Mundial: el arte mudéjar de la región, el itinerario propio del Camino de Santiago, el encanto de Pirineos-Monte Perdido y el conjunto del arte rupestre del Arco del Mediterráneo.
La presentación corrió a cargo del vicepresidente del gobierno autonómico Arturo Aliaga, que acompañado de otros mandatarios institucionales se ocupó de recibir a Felipe VI y la Reina Letizia en el pabellón de Turespaña. En sus declaraciones, Aliaga quiso dejar claro el buen estado de forma por el que atraviesa el sector turístico en Aragón, que durante el curso pasado rebasó los tres millones de turistas y los siete millones y medio de pernoctaciones. Son cifras que reflejan la recuperación del segmento, y es que casi igualan a las del último año prepandémico, el 2019, que contó con un récord histórico de visitantes.
En esta misma sintonía de prosperidad se mueve también el trabajo que realizan diariamente las más de ocho mil empresas de carácter turístico con sede en la región. No en vano, se trata de una actividad que a día de hoy supone en torno al nueve por ciento del Producto Interior Bruto. Son números que apuntalan la importancia del turismo interior y que además contribuyen a que la población joven permanezca en el territorio durante más tiempo, reduciendo así el impacto en la España vaciada.
El espacio expositivo que Aragón ha puesto en marcha en Fitur se ha centrado especialmente en la idea de dar a conocer el gran caudal de cultura y naturaleza que atesora la zona, además de todo el ramillete de actividades turísticas y de ocio que se organizan durante todo el año, desde el ecoturismo y el turismo familiar hasta las propuestas relacionadas con el vino y la gastronomía. Es precisamente este último elemento, el de la comida aragonesa, el que ha tenido un hueco especial en esta feria, donde se han dejado ver, entre otras cosas, los productos de la Artesanía Alimentaria y del sello de C’alial, así como el Jamón de Teruel y el Ternasco de Aragón.
También la Comarca de la Hoya se ha visto representada en Fitur, y es que acaba de lanzarse una aplicación móvil de tipo turístico que permite conocer el sitio desde un punto de vista diferente. La app se llama ‘Ecos en el paisaje’ y propone al visitante la audición de hasta siete relatos vinculados con la comarca, protagonizados por personajes de ficción y que sirven para enlazar un interesante recorrido por los pueblos, sus monumentos, su cultura y su historia. Todo ello, completando cada ruta con explicaciones añadidas y visitas virtuales de 360 grados.
Para garantizar la integridad de los datos personales de los usuarios, ‘Ecos en el paisaje’ ha implementado en su estructura el mismo software que utilizan las grandes referencias virtuales en materia de protección, como son las entidades bancarias y las plataformas de juegos de azar. En este sentido, la app cuenta por ejemplo con el conocido como certificado TLS (Transport layer security), una tecnología que usan los bancos de nueva generación para cifrar todo el contenido sensible de sus clientes, ya sea un nombre completo, un número de cuenta o una clave privada.
La aplicación móvil de la Comarca de la Hoya dispone asimismo de un software de verificación de identidad que está diseñado para evitar las suplantaciones de perfil. Se trata del sistema KYC (Know your customer), y se emplea mucho en los mejores casinos online para comprobar que el jugador que intenta acceder a su cuenta es en efecto quien dice ser. El funcionamiento es tan sencillo como útil: los operadores de juego solicitan en cada inicio de sesión toda la documentación telemática que sea necesaria para identificar correctamente a los usuarios. En algunos casos, el proceso se intensifica y el sistema puede exigir pruebas de tipo biométrico, como las de reconocimiento facial o las de escaneo de huellas dactilares.
En el stand de Aragón ha habido de igual modo espacio para resaltar el encanto de los trece municipios aragoneses que se encuentran en la lista de los más bonitos de España. A través de un vídeo explicativo y promocional que trata de revalorizar la identidad de la zona, la Dirección General de Turismo ha realizado una exhaustiva presentación de pueblos tan señeros como Albarracín, Alquézar, Aínsa, Sos del Rey Católico, Valderrobres, Ansó, Calaceite, Anento, Puertomingalvo, Rubielos de Mora, Cantavieja, Mirambel y Roda de Isábena. Por su parte, la oferta turística de la Comarca de Sobrarbe se ha dado a conocer a través de diferentes exposiciones, en las que se ha puesto en valor el espacio del Geoparque Mundial Unesco Sobrarbe-Pirineos.