Ginés Meléndez, Seleccionador Nacional Sub-17 desde 2002 y Director de la Escuela Nacional de Entrenadores, impartió una charla de contenido técnico a 45 alumnos del Curso de Entrenador de Nivel 1, que se celebra en Barbastro. En su primera visita a la ciudad le acompañaron Pedro Aróstegui y César Ascaso, de la Escuela Aragonesa de Entrenadores; y los técnicos Manolo Tena, Julio Salinas, Cristian Abad y José María Galicia.
En el palmarés de la Selección Sub-17 de los cinco años últimos destacan varios títulos, entre ellos Campeón de los Juegos del Mediterráneo (2005), Medalla de Bronce en el Mundial Sub-17 (2009) y Subcampeón de Europa Sub-17 (2010). Meléndez destacó la formación de los entrenadores como uno de los pilares básicos en los éxitos conseguidos en todas las categorías, “la formación es cada vez mejor y tenemos más cultura futbolística europea con salidas de los entrenadores fuera de España”.
En su opinión “se ha cambiado la garra tradicional por otros aspectos muy definidos. El entrenador es más gestor que técnico. Antes, se encargaba de todo, preparación, porteros y estrategia. Hoy gestiona un equipo humano con psicólogo, preparador físico y entrenador de porteros. La formación llega a muchos ámbitos que incluyen nuevas tecnologías y relaciones con medios informativos porque son muy importantes”.
La situación del fútbol en general, “España somos la cabeza visible del mundo, ha habido países como Alemania que han mejorado después de un paréntesis mientras que Francia está en el impasse de tomar un camino”. Respecto al cargo, “el año pasado fuimos terceros del Mundo, segundos de Europa y nos clasificamos para el Mundial Sub-21”.
Destaca las posibilidades, “tenemos un gran equipo formado por jugadores muy buenos de la promoción del 90 y 91, el objetivo es clasificarnos para las Olimpiadas después de ocho años sin participar”. Trabaja para el equipo del señor marqués “a Del Bosque ese título no le va mucho. Es una persona muy entrañable”.
El fútbol y los jóvenes han cambiado, “aprovechamos el trabajo bueno que hacen los clubes porque disponemos de poco tiempo. En la Selección hay normas y valores fundamentales necesarios. Compañerismo, humildad y solidaridad son irrenunciables y son los primeros que aprenden”. A la hora de dar consejos, “lo más importante es que tengan ilusión por el deporte y sobre todo, que sean humildes porque los triunfos llegan con el tiempo. Que no vean fantasmas por agentes externos y jueguen al fútbol, si les gusta, claro”.
Respecto al papel de los padres, “son fundamentales en la guía de los jóvenes. Los padres tienen que ser los mejores consejeros, no sus peores agentes”. Reitera la importancia de la formación, “cuando hablo con la familia del jugador detecto, rápidamente, si llegará a alguna parte o no”.
El trabajo comienza en las bases, “se han juntado tres grupos humanos muy buenos, todos venían desde abajo. De los veintitrés jugadores del Mundial, diecinueve ganaron medallas en equipos de categorías inferiores. El trabajo desde la base es muy bueno”. Los relevos generacionales son de garantía, “están hechos y no son niveles tan altos como Iniesta o Xavi porque es muy difícil”.
Aragón es cantera de buenos jugadores, “quizás falte un poco de estructura de juveniles hacia arriba pero en la Selección tenemos aragoneses en todas las categorías”. Ander Herrera, Jorge Ortiz, Joel Valencia y Juan Montero son “botones de muestra” que cita porque “apuntan muy buenas maneras”.
El trabajo de Guardiola
La cantera del Barcelona, la confianza de Guardiola y sus resultados “son ejemplares” si bien señala “cada cantera trabaja a su manera, en general bien y con estilos diferentes”. Reconoce que el técnico azulgrana “ha implantado un estilo de juego que no es nuevo, hace diez o doce años que lo practican. Ahora recogen frutos con la llegada de un entrenador de casa que ha sido valiente y los ha pasado al primer equipo. Eso les ha llevado a conseguir los resultados actuales”.
