NdP.
El diputado responsable de Bienestar Social, Luis Felipe, ha explicado al finalizar la reunión de la Comisión el firme compromiso de la Diputación de Huesca para con aquellas acciones que atienden políticas sociales y cubren necesidades de colectivos vulnerables en la provincia de Huesca. “Ante los recortes del Gobierno de Aragón o del Gobierno central en políticas sociales la Diputación de Huesca mantiene el respaldo a este tipo de acciones”, ha confirmado Luis Felipe.
En este sentido, se ha aprobado la concesión a los Servicios Sociales de Base de las diez comarcas altoaragonesas y del ayuntamiento de Huesca de un total de 122.000 euros que contribuirán a financiar 17 programas de atención social. Apoyo y formación a familias, ayudas a transeúntes y personas sin hogar, servicios complementarios a la ayuda a domicilio, centro de distribución de alimentos, ayuda para movilización de enfermos encamados en su domicilio, transporte social adaptado y otros programas de atención social a las personas que viven en el medio rural.
“La Diputación apuesta como ha apostado siempre por las políticas sociales y más en momentos de extrema dificultad para muchas familias que han perdido su trabajo y consideramos prioritario atender a estos colectivos que son los que más necesidades tienen”, ha dicho Luis Felipe. Este tipo de ayudas posibilita cubrir todos los municipios de la provincia, además de la propia capital.
Por otra parte la Comisión de Régimen Interior y Bienestar Social ha aprobado la concesión de subvenciones a entidades sin ánimo de lucro que trabajan en el ámbito de las toxicomanías. En total se respaldará con 54.000 euros las acciones que llevan a cabo las asociaciones Casa Familiar San Lorenzo de Hermanos Franciscanos de la Cruz Blanca, el Centro de
Solidaridad Interdiocesano de Huesca, la Asociación Ibón de Drogodependencias, la Asociación Española contra el Cáncer, la Fundación Cruz Blanca -Delegación Aragón y Cruz Roja Española.
Estas asociaciones llevan a cabo actividades y programas sobre la lucha contra las toxicomanías en la provincia de Huesca y este tipo de ayudas contribuye a reforzar la prevención y sensibilización que desarrollan, así como respaldar las acciones de los casos que atienden.
Es necesario regular de verdad las funciones de nuestras instituciones. Porque pienso que la DPH no es una ONG, y que su función es atender y ayudar a los ayuntamientos, en vez de inmiscuirse en actuaciones que no le corresponden y que ya atienden las que están para ello. Es la manía de algunos políticos de hacerse propaganda a costa de lo que hacen con el dinero público, que no es de ellos, sino de los contribuyentes. La DPH es lo que es y se debe ceñir a lo que debe hacer.