El pasado 21 de agosto se reunió el tribunal para la selección de las candidaturas presentadas al premio «David Gómez Samitier 2009», galardón que convoca la Comarca de Somontano de Barbastro cada dos años y que reconoce las actuaciones que contribuyen a la protección, defensa y divulgación del medio ambiente en el territorio comarcal.
Por unanimidad, fue elegida la candidatura presentada por Cruz Roja Somontano. Esta asociación con sede en Barbastro ha creado un grupo de voluntariado medioambiental, con el objetivo de contribuir a la conservación y recuperación de los recursos naturales del Somontano, y muy especialmente de los ríos y sus riberas. También informan y sensibilizan a la población sobre la necesidad del cuidado y conservación del medio ambiente, y promocionan la figura del voluntario ambiental como muestra del compromiso de los ciudadanos con el entorno. Se ha valorado especialmente la constancia del grupo de voluntarios desde su creación, así como el interés demostrado por extender las actividades hasta todo el territorio comarcal.
El resto de candidatos han sido el Ayuntamiento de Ilche, por la recuperación de dos espacios degradados dentro del casco urbano; la Asociación Cultural Santa Águeda de Huerta de Vero, por la organización de sus Jornadas Medioambientales; la oficina de Barbastro de la Confederación Hidrográfica del Ebro, por la colocación de rampas de salida en el canal para la fauna salvaje que cae al agua; y el Colegio Alto Aragón de Barbastro, por sus actividades para fomentar la sostenibilidad del colegio entre los alumnos, padres, profesores y resto de personal del centro.
El premio se concederá en un acto oficial el viernes 28 de agosto a las 11:00 h en el salón de actos de la Institución Ferial de Barbastro, y lo entregará el Presidente de la Comarca de Somontano en funciones D. Santos Larroya Domper.
El premio es una obra creada por el artista barbastrense José María Lacoma. Se trata de una escultura de 32 x 28 cm. realizada en hierro y montada sobre una peana de mármol blanco. Simboliza una cigüeña, o cualquier otra ave similar, en el momento de emprender el vuelo. En su diseño se ha partido de un desarrollo abstracto formado por la composición de líneas curvas y rectas que forman el cuerpo, el pico y las patas, y definen los dos planos que forman el volumen del ave. El pico y las alas forman líneas y planos paralelos al plano horizontal del suelo con la idea de conseguir el efecto de un movimiento a punto de iniciarse. Toda la figura se apoya en un punto mínimo para conseguir la esbeltez y aspecto aéreo deseado. La cigüeña es un ave a la que David Gómez Samitier prestó una atención especial por su carácter migratorio y por su hábitat relacionado con los humedales y demás zonas tan ricas como ejemplos para el estudio de la biodiversidad.
Este premio reconoce el trabajo del malogrado naturista barbastrense.
