Abrigados con chaquetas, jerseys, los característicos blusones de los peñistas y algún que otro paraguas. Así pasaron ayer los montisonenses el ecuador de sus fiestas mayores en honor a San Mateo que se celebran hasta este lunes y que se están desarrollando con buen ambiente en las calles aunque condicionadas por la climatología.
En la noche del jueves la lluvia obligó a suspender el concierto de rock de los veteranos Porretas, en la Plaza del Mayor. Y ayer, al cierre de esta edición, estaba prevista la actuación de otros viejos rockeros, los ejeanos Tako junto con Dj Tupe, en la avenida de Lérida. Hoy será el turno de Amaral, más Copiloto, en el Isidro Calderón, si el tiempo lo permite a la medianoche.
Pero San Mateo no sólo son conciertos -que también- sino actuaciones callejeras para todos los públicos como el Paseo de las Sorpresas instalado en la calle Juan de Lanuza y por el que ayer desfilaron zancudos, bailarinas de época, los cabezudos, payasos, gigantes pompas de jabón y músicos ambulantes. Esta propuesta lúdica -que se lleva a cabo todos los días- también cuenta con juegos y con un planetario para explicar a los niños nuestro Sistema Solar.
La jornada de ayer estuvo dedicada a los mayores con el Homenaje a la Tercera Edad por parte de las autoridades en el Auditorio San Francisco, donde los matrimonios que celebraban las bodas de oro, Ángel Sesé y Josefina Lanau y José Lueza e Irene Fantova, recibieron sendas placas conmemorativas y ramos de flores por parte del alcalde y del concejal de fiestas. Y después sesión de baile en la Carpa Transbaso en el parque de la Azucarera, mientras los jóvenes se divertían en su zona de chamizos, a unos metros de distancias.
¿Qué ha pasado con el concierto de Amaral? ¿Se pudo mantener o lo fastidió la lluvia?
El concierto de Amaral se celebró con total normalidad. Todo un éxito. Éramos 8 mil personas y fue un conciertazo. Ya le hacía falta a Monzón algo así desde hace muchos años.