La sala de exposiciones de la Casa de la Cultura de Barbastro acoge hasta el 3 de junio la muestra pictórica ‘Estallo + De Foe. Acción’, que aúna la obra de dos artistas de la ciudad del Vero abstractos, existencialistas y con una mirada rebelde y crítica.
Fernando Estallo y Lux de Foe (alter ego de Chema Pueyo), viejos amigos unidos por un universo intelectual común marcado por el post conceptualismo, vuelven a coincidir en una sala de exposiciones para exponer dos trabajos diferentes pero que ensamblan a la perfección. El papel es el soporte en el que ambos expresan sus trazos zen, en el caso de Fernando Estallo, y en el de Pueyo con sus fotografías que reflejan un grito interior subrayado por la fuerza del pincel rojo y negro.
La obra de Estallo tiende al minimalismo, usando materiales simples como el papel y útiles como cables o trozos de tela que inserta en sus cuadros a modo de collage. La textura es crucial en la obra de Estallo, que si hace unos meses estaban también en esta sala reflexionando sobre el misticismo con un homenaje a su admirado Víctor Mira, ahora aborda la cuestión de los estoicos estilitas (eremitas subidos a columnas donde aislarse del mundo para alcanzar la divinidad y encontrarse consigo mismo).
En cuanto al soporte que en la obra de Estallo es sobre todo contenido, se opta por «lo más humilde, sencillo y mínimo como el papel Manila. A partir de ahí he ido creando una especie de mitología simbología sobre por un lado los estilitas y por otro lado el sistema sanguíneo con un collage que es habitual en mí». La película ‘Simón en el desierto’ de Buñuel o de nuevo la obra del ya citado Mira están presentes en la inspiración del trabajo de Estallo. «He querido desmitificar esos estilitas de Mira en su soledad, en esa angustia y en esos espacios perdidos o los estilitas de la antigüedad que reflexiona Buñuel en su película. Los libero de esos estereotipos y los presento gordos, con aros en las orejas y con corazones cableados», explica este artista que se define como un pintor intimista que reflexiona constantemente sobre uno mismo. «Es una pintura contemplativa nada decorativa», matiza.
De Foe opta por la imagen, tanto la fotografía como por el vídeo, para rendir homenaje a su maestro e inspirador de esta serie Joseph Beuys. «Me gusta lo tráfico y lo real, y lo real no es nada blando ni dulce, con mis colores favoritos el negro y el rojo. Me gusta siempre la expresión más directa y más real de cada situación de la vida. Mi obra es un expresionismo directo y muy duro», apunta Pueyo.
Algunas de las obras se han creado conjuntamente en el estudio de Estallo en las llamadas ‘noches chechenas’ y por su parte, Luc trabaja en Cambrils y a lo largo de sus viajes, como una impactante imagen tomada en Turquía en la que reflexiona sobre los estragos de la droga.
La crítica de arte Virgina Baig fue uno de los rostros conocidos que estuvieron en la inauguración de la exposición, entre otros como el periodista colaborador de HERALDO Rafael Bardají, o el escritor Severino Pallaruelo y la diputada María Victoria Broto, amigos de los artistas.
Baig calificaba la exposición con estas palabras la muestra: «Todo un trabajo creador emocional, como muestran sus audaces gestos y arrebatadores ritmos: texturas, manchas, garabatos, grafías, textos. Pero también manifiestan en sus obras un cierto espíritu lúdico y una sensible levedad».
Buena exposición de expresionismo abstracto. No os la perdais.