«Hay hombres que luchan un día y son buenos. Hay otros que luchan un año y son mejores. Hay quienes luchan muchos años, y son muy buenos. Pero los hay que luchan toda la vida: esos son los imprescindibles». La célebre frase de Bertolt Brecht bien se puede atribuir a Juan Carlos Rafel, fallecido ayer al no poder vencer a un cáncer que le afectaba desde hace tiempo (¿por qué la ciencia está consiguiendo erradicar enfermedades a lo largo de los siglos y nada se está pudiendo hacer con el cáncer? ¿Qué está fallando?).
Juan Carlos no sólo era imprescindible para ésta y cualquier sociedad. Era un hombre bueno en el sentido machadiano de la palabra. Un ser de luz, bondad pura. Una de las personas, si no la más buena que he conocido. Esa bonhomía marcó todas las facetas de su vida.
Lo conocí en los Boy Scout con sus hermanos como monitores. Allí ya desplegaba una química con los chavales que le haría ser querido por tantos jóvenes de mi generación y de otras. Los Scout son una escuela de valores morales y medioambientales y ese espíritu lo encarnaba a la perfección Juan Carlos. Ya desde su juventud, el trabajo por conseguir una mejor sociedad, más igualitaria y más justa, y el desarrollo de la misma, en armonía con la naturaleza, fueron sus características más identitarias.
Su vinculación con el deporte también fue otro rasgo de su personalidad. Dinamizador de la liga de fútbol local, una roca como defensa, y un aglutinador siempre en una competición que hablaba del mestizaje étnico existente en la ciudad unido por el fútbol. Cómo así debería ser. El deporte para hacernos mejores personas, mejor sociedad. Así lo concebía Juan Carlos haciendo suya la esencia olímpica.
Quiero recordar su sentido del humor, tenía un sentido del humor socarrón, propio del buen aragonés.
Heredero intelectual de las JOC (Juventudes Obreras Cristianas), militó en CC.OO, trabajó en Cáritas en distintos ámbitos (al frente del centro de menores de Monzón o como trabajador social), fue junto a Begoña Mur y Joaquín Salamero creador de la asociación Tritón encargada de la gestión del Espacio Joven de Monzón desde su inauguración. También gestionaron el parque Multiaventura de Castejón del Puente. A destacar también en el ámbito de la juventud y la infancia su figura como uno de los impulsores y dinamizadores de la feria del ocio y asociacionismo juvenil Zagalandia. Siempre en estrecho contacto con el Espacio Joven de Barbastro.
En el plano político fue concejal de CHA en el Ayuntamiento de Barbastro, un mandato y medio, al inicio del nuevo siglo, donde destacó por su talante conciliador. Siempre buscando la resolución del conflicto de modo consensuado y para el bien de todas las partes. Trató de volver a serlo sin éxito como número dos de la confluencia de izquierdas Barbastro En Común Cambiar en las pasadas elecciones.
Se definía, como así hemos recogido en algún artículo en Ronda Somontano, como un «activista político y social» y bajo esa premisa se sumó al Foro B 21 desde su creación, como herramienta de diálogo y para transformar desde las ideas la sociedad barbastrense que tanto le preocupaba.
En su etapa como concejal y después reclamó insistentemente la aplicación de los acuerdos de la Agenda 21, una hoja de ruta medioambiental para la ciudad y ya entonces enarboló la bandera de la recuperación de la antigua línea de ferrocarril para convertirla en una vía verde. Años más tarde, sería el portavoz de la plataforma cívica que ha peleado hasta conseguir que Barbastro por fin tenga su vía verde hasta Selgua y Monzón, pasando por su querido Castejón del Puente.
Estos días los trabajos de la infraestructura se desarrollan a buen ritmo. Y el éxito de este ramal convertido en paseo ciudadano y ciclista ya es un éxito antes de haber sido construido. Rafel, su hermano Quino como Pedro Solana, Luis Calvo, Conrado Chavanel, y otros, fueron unos visionarios y tenaces en su empeño.
La vía verde tiene ya un nombre administrativo Barbastro – Castejón del Puente – Selgua – Monzón, pero para mí siempre será la vía verde Juan Carlos Rafel. Apelo a la sensibilidad de nuestras autoridades a que de algún modo la figura de Juan Carlos quede recordada a lo largo de esos 18 maravillosos kilómetros de paseo en comunión con la naturaleza. Un camino que conecta territorio del mismo modo que Juan Carlos conectaba personas.
La vida es una puta y ha sido cruel contigo. Pero le doy gracias por tu existencia y por que haya podido conocerte y quererte.
D.E.P. querido Juan Carlos y gracias por todo lo que has hecho por Barbastro.
Como dice mi mujer Ruth, “Barbastro ha perdido un hombre bueno, no había muchos como él”.
7 comentarios
Nos unía el aragonesismo y la defensa del medio natural.
No vivo en Barbastro; pero paso con frecuencia por Barbastro y solíamos coincidir en el bar Hnos Cantín dónde siempre charrábamos un rato. Era gratificador hablar con él. Yo le solía preguntar por temas de la actualidad para que me diera su opinión y siempre acababa convenciéndome. Se notaba que Juán Carlos era de las personas que saben reflexionar y sacar sus conclusiones de manera imparcial y acertada.
Luego me dijeron que andaba mal de salud al tiempo que cerraron el bar y ha sido este fín de semana que asistí a la entrega de los premios 2024 de la Fundación Chesús Bernal que pregunté por él y me dió la triste noticia un compañero suyo.
Deseo estés en buen sitio, Juán Carlos, como creo que tienes merecido, y que desde allí sigas con tu trabajo por un mundo más justo, pues no veas como está el patio y como son necesarias personas como tú.
Siempre te recordaré, Juán Carlos.
Gente buena: Buen amigo, buen hermano, buen vecino y alma buena. Ser de luz y un verdadero héroe. Porque el verdadero héroe no busca el aplauso, surge del deber y la valentía, aunque sus pequeñas o grandes proezas pasen totalmente inadvertidas.
Iluminó muchas vidas con su presencia, tejiendo vínculos significativos en cada rincón que pisaba. Siempre compartiendo risas en días soleados y ofreciendo su hombro en días nublados. Su generosidad se manifestaba en simples actos de amabilidad.
Dicen que un alma buena es aquella que irradia bondad desde su núcleo. Y que una persona de alma buena deja huellas de positividad y afecto en su camino, inspirando a otros a construir un mundo mejor. Sin duda eras un alma buena.
Siempre, desde que lo conocí, y de eso hace muchísimos años, Juan Carlos destilaba esencia de gente buena: Aquellos que nutren amistades, fortalecen lazos familiares, y construyen comunidades. En su presencia, el mundo se volvía un lugar más cálido, más amable y más humano. En tu ausencia, te recordaremos por siempre. Gracias por tanto AMIGO, hermano. Ha sido un enorme placer y un verdadero honor compartir un trocito de mi vida contigo. Lo hiciste muy bien. Descansa en Paz. Volveremos a vernos.
Juan Carlos fue un activista, muy necesario en estos tiempos donde la conciencia de lo social cotiza a la baja, sin duda una figura imprescindible en nuestra ciudad. Nos deja un boquete pero su recuerdo quedara en nuestras mentes y corazones.
Un fuerte abrazo a la familia de sus amigos del FORO B21.
El dedicarle a JUAN CARLOS con su nombre la Vía Verde, sería lo más justo y apropiado, luchó mucho por conseguirlo, eso y otras muchas cosas en nuestro pueblo y alrededores.
Juan Carlos, tú vida no ha sido tarea fácil, pero nos la has hecho muy fácil a todo el que hemos tenido la oportunidad de conocerte tanto como vecino, como amigo o como ciuidano, siempre has tenido el don de ponerte en el lugar adecuado y en silencio.
Te echaremos de menos Juan Carlos.
Vuela alto, alto. Tu recuerdo siempre estará presente entre nosotros. Y apoyo la idea de nombrar y dedicarte de todo corazón la inauguración de la vía verde, por la que tanto luchaste.
Hasta siempre Juan Carlos.
Siempre fue una persona risueña y amable con los demás, organizando, participando y ayudando en eventos dirigidos hacia la juventud y ciudadanos de Barbastro y comorca, siempre lo recordaré con una sonrisa… Descansa en paz Juan Carlos. Mis más sinceras condolencias a la familia y amigos
Unas palabras muy merecidas, me lo voy a imprimir, será un recuerdo extraordinario, ojalá te hagan caso en tu reivindicación, gracias por pasar a escritura unos sentimientos que todos estamos sufriendo en estos momentos, gracias JL