¿Cuántas veces has escuchado ‘coronavirus’ hoy? El caos absoluto se ha instaurado en la vida académica de los españoles y españolas, en su vida laboral, en el ocio rutinario, hasta en algo como el uso del transporte público. En muy poco tiempo hemos tenido que adoptar una serie de medidas que atentan a esa normalidad de la que gozábamos hace unos días.
¿De verdad es tan grave? Lo es, es grave porque la propagación de este virus está enfermando a muchas personas y, las que no pueden luchar contra él, fallecen inevitablemente al no haber una cura eficaz contra ello. El contagio es lo que ha hecho que las autoridades tomen medidas radicales y adviertan que seamos responsables y participemos en el protocolo estipulado.
A pesar de no parar de escuchar hablar de él, muchos somos los que no conocemos a nadie infectado y nos asaltan una serie de dudas acerca de cómo se detecta, síntomas más allá de la tos, cómo te sientes y qué medidas puedes tomar para que el proceso de curación no se alargue demasiado.
Una persona infectada que actualmente se encuentra en cuarentena nos explica qué le está ocurriendo: “Yo pensaba que era alergia porque empecé con moquillos, luego ya me empezó a doler la garganta y empecé con la tos (cosa importante, que ha rulado por ahí que si tienes mocos no es COVID-19 y es un bulo, sí que es síntoma) y entonces fue cuando me puse en cuarentena por si acaso, porque si estás con pocos síntomas no te hacen la prueba (al menos en Madrid)”.
“Luego ya a partir de ayer, me bajó la tos al pecho y empecé a sentirme muy cansada, que era como si me faltase el aire de haber hecho mucho deporte y a lo mejor solo había comido, o me había levantado para ir al baño, y también me subió un poquito la fiebre (pero nada, 37’5)”, reconoce. “Entonces, como era ya más grave me llevaron al médico y di positivo en la radiografía, porque tengo neumonía atípica causada por COVID-19”.
En cuanto a la situación del personal sanitario, esta afirma que “es mejor no ir al médico si no estás muy mal, para no saturar el sistema para gente que sí lo necesita, por eso en principio yo no iba a ir, ni me iba a hacer la prueba. Cuando ya presenté síntomas de neumonía me llevaron por si estaba peor. Me atendieron muy bien, pero hay que entender que los médicos están muy ocupados y tardan bastante en atenderte, porque no paraba de oír llamadas desde la sala en la que me dejaron, al mismo tiempo que cuidaban a los graves y atendían al resto de la sala de espera. Pero en principio sí son los que se acercan ellos, o sea mejor llamar que ir al médico porque allí ya están los graves”.
Al vivir con más personas, tenemos la duda de qué medidas deben adoptarse y con qué límites para evitar el contagio, pues resulta muy complicado cuando compartes espacios u objetos. La persona que nos ha facilitado la información anterior admite que “vivo en una casa grande, entonces yo estoy en mi habitación y uso para mí sola el baño de al lado (sé que esto no puede ser así en muchos casos, entonces si debes compartir baño lo que hay que hacer es limpiarlo todo con lejía cada vez que lo uses). Nadie puede entrar donde yo estoy, entonces me suben la comida y me la dejan en la puerta cuando me hace falta, y tengo un cubo donde ir dejando los cacharros. Cuando los recogen al final del día, lo cogen con guantes y lo limpian con lejía”.
Más allá de las medidas de prevención ante cualquier contacto social, debemos tener en cuenta que las personas infectadas, que no hacen más que aumentar, deben seguir con un estricto ritual que evite poner en riesgo a más. Es muy importante que al mínimo síntoma avisemos al personal sanitario, para no propagarlo. Bulos como que si estás sano o sana te hacen pasarlo con normalidad queda desmentido por el caso que contamos, pues esta persona es joven y no sufría ninguna patología previa y se le ha complicado con la aparición de la neumonía.
Según la Organización Mundial de la Salud las medidas que deben mantenerse son la de lavarse las manos frecuentemente, adoptar medidas de higiene respiratoria al toser o estornudar, mantener el distanciamiento social, evitar tocarnos los ojos, nariz y boca, si registra fiebre, tos y dificultad para respirar, solicitar atención médica.