Un llamativo despliegue de las fuerzas de la Guardia Civil en una vivienda en el corazón de Barbastro que se saldó con la detención de tres individuos, provocó ayer el revuelo de muchos vecinos.
Dos furgonetas patrulla de la Guardia Civil cortaron el acceso a la zona centro de la calle Argensola o Mayor de la capital del Somontano para proceder a las detenciones de tres ciudadanos de origen marroquí que viven en el tercer piso del de la vivienda 33. Los detenidos son de mediana edad, alrededor de cuarenta años, y viven con otros compañeros marroquís alquilados en un antiguo inmueble, próximo a la plaza del Mercado, centro neurálgico de la ciudad del Vero.
La operación comenzó sobre las 9.45 y finalizó al cabo de dos horas. Los agentes de la bemenérita acudieron con pasamontañas y chalecos antibalas, según relataron algunos vecinos, lo que causó cierta alarma entre los vecinos. Asimismo penetraron en el domicilio de los detenidos con un perro. Los vecinos del inmueble oyeron ruidos pero los achacaron a habituales disputas que se producen en el piso donde viven los marroquís. Más tarde comprobaron el ámplio dispositivo de seguridad que había cortado la arteria a la altura de la plaza del Mercado y de la calle colindante Caballeros.
Sobre las 11.45 terminaba el registro y la operación y tres individuos eran introducidos en un furgón de la Guardia Civil, según relataron testigos presenciales. «Ha sido como una película y ha dado mucha impresión», relataba una vecina residente en el inmueble.
La calle Mayor es una arteria muy frecuentada por los barbastrenses ya que desemboca en el Ayuntamiento y en la plaza del Mercado. Allí se encuentran establecimientos comerciales, bares y una panadería, justo debajo del imnueble donde residen los detenidos, por lo que la expetación del operativo fue seguida y comentada por muchos vecinos. Incluso ayer en las redes sociales y en los wasaps se comentaba los posibles motivos de la detención.
Algunos vecinos comentaban que era frecuente oir discusiones y gritos en el piso de los marroquís. «Alguna vez hemos pensado en llamar a la policía por el ruido que montaban», aseguraba otra vecina.
La operación se encuentra bajo secerto de sumario, por lo que la Guardia Civil no ha revelado datos al respecto.
Se conoce que un dispositivo similar se realizó ayer en otras partes de la provincia y del territorio nacional.