El martes 13 de enero, la localidad de Colungo fue testigo de la última reunión del Patronato del Parque Natural de la Sierra y Cañones de Guara, órgano de representación de este espacio natural. Las respuestas de los responsables del Gobierno de Aragón a las preguntas de los representantes ecologistas sobre la finca de Bastaras, donde se encuentra la cueva de Chaves recientemente destruida, han sido recogidas por Ecologistas en Acción con cierta decepción y preocupación por el futuro de este enclave.
Los representantes ecologistas en el Patronato del Parque Natural de la Sierra y Cañones de Guara realizaron en la reunión una serie de preguntas sobre las actuaciones que se están llevando a cabo para restaurar los destrozos realizados por FIMBAS. S.A y para la recuperación del espacio público usurpado en la finca que gestionan. De la información trasmitida por los responsables del Gobierno de Aragón, se desprende que los Agentes de Protección de la Naturaleza continúan teniendo dificultades para acceder a la finca a pesar de su condición de Agentes judiciales, no contando con llaves que permitan su entrada rápida en la misma, dependiendo siempre de la disponibilidad de los propietarios. Esta cuestión dificulta la actividad de vigilancia e inspección que tienen encomendada estos agentes, por que así la empresa elige cuándo debe ser inspeccionada.
Por otro lado, todavía no han comenzado las obras de retirado del vallado que usurpa un monte público, a pesar de que el Consejero de Medio Ambiente, Alfredo Boné, aseguró a los medios de comunicación y en comparecencia en la Comisión de Medio Ambiente de las Cortes Aragonesas que se comenzaría sin ninguna dilación en noviembre de 2009.
También durante la reunión del patronato se habló del futuro Plan Rector de Uso y Gestión de Guara. A este respecto, Manolo Campelo, miembro de Ecologistas en Acción y representante ecologista en el Patronato del Parque Natural de la Sierra y Cañones de Guara, aún considerando su aprobación una de las prioridades para la conservación de este espacio, ha manifestado, precisamente por los problemas detectados en la finca de Bastaras, su absoluta falta de confianza en la gestión futura de este Plan «cuando en la actualidad la administración no es capaz de velar por lo contemplado en el Plan de Ordenación de los Recursos Naturales, parece totalmente imposible que lo pueda hacer con una norma más desarrollada y por tanto necesitada de mayor compromiso ejecutivo».
Los representantes ecologistas se reafirmaron en las cuatro exigencias, que ya habían trasladado en anteriores reuniones, sobre la necesidad de actuar en Bastaras: que la derogación del coto de caza sea permanente mientras sea gestionado por FIMBAS; la retirada del vallado en todo el perímetro de la propiedad; el cumplimiento de las obligaciones de los propietarios de la finca sobre los enclaves arqueológicos y la recuperación del uso general de los espacios públicos; y el regreso de la figura del director conservador de este espacio natural.
Como cuestión positiva de la reunión se encontraría el anuncio por parte de la representante del Ayuntamiento de Casbas de Huesca, de que se estaban iniciando los trámites pertinentes para exigir el libre acceso por el camino municipal que transcurre por el interior de la finca. A este respecto Ecologistas en Acción que ha venido desarrollando varias actuaciones en la misma dirección, no puede mas que congratularse por la noticia y se pone a disposición del Ayuntamiento de Casbas para cuanto consideren oportuno.