La Junta de Castilla-León y el Grupo Forestalia impulsan una planta de generación de energía eléctrica limpia mediante biomasa en El Bierzo (León) al igual que la que tienen previsto construir en Monzón. Para ello, el Grupo Forestalia, la Sociedad Pública de Infraestructuras y Medio Ambiente de Castilla y León (Somacyl) y el Ente Regional de la Energía (EREN) están colaborando intensamente en los últimos meses, con objeto de analizar conjuntamente todos los elementos necesarios para ubicar una planta de estas características en la comarca berciana.
El Grupo Forestalia fue el pasado mes de enero el mayor adjudicatario de la subasta del Ministerio de Industria, Energía y Turismo para la asignación del régimen retributivo para nuevas instalaciones eólicas y de biomasa, con 408,5 megawatios (MW).
El proyecto prevé construir en El Bierzo una planta de generación de energía eléctrica verde de 49,5 MW de potencia instalada. En la selección del emplazamiento concurren criterios técnicos, de garantía de suministro de biomasa y de evacuación de la energía eléctrica producida, así como motivos socioeconómicos para el desarrollo estratégico territorial.
El combustible será íntegramente biomasa forestal y agraria, principalmente de las zonas cercanas a la planta, lo que garantiza un ciclo de producción de energía limpia, renovable, sostenible y nacional. Además de la generación eléctrica, se podrá producir calor para su distribución y uso.
Según los primeros cálculos, la inversión necesaria se estima en torno a los 80 millones de euros, la planta consumirá cerca de 400.000 toneladas de biomasa y los puestos de trabajo directos industriales se calculan en 50. Teniendo en cuenta los servicios que conllevará la planta: transportes, logística, trabajos agrarios y forestales, se valora una repercusión de 400 puestos de trabajo directos asociados a estas actividades, al margen del empleo inducido en otras áreas.
El objetivo es comenzar la construcción de la planta de biomasa en 2017, una vez que se obtengan las diversas autorizaciones administrativas. En los trabajos de construcción, que durarán unos dos años aproximadamente, se ocuparán más de 250 personas. Todas estas previsiones serán concretadas durante la definición precisa del proyecto.
Esta iniciativa se enmarca en el Plan de Dinamización Económica de los Municipios Mineros de Castilla y León, aprobado por la Junta el 26 de mayo y refrendado en las Cortes autonómicas el 7 de junio.
GRUPO FORESTALIA
El Grupo Forestalia tiene actividad en España, Francia e Italia, países en los que desarrolla una larga actividad de producción de cultivos energéticos, biomasa que suministra a plantas de generación de compañías eléctricas europeas.
El Grupo, de raíces aragonesas, está desarrollando actualmente en Erla (Zaragoza) la mayor planta de producción de pellets y astilla de España. En generación eléctrica limpia mediante biomasa, Forestalia impulsa plantas en Monzón (Huesca), donde ya dispone de las autorizaciones ambientales, y las localidades zaragozanas de Erla y Zuera, actualmente en tramitación. Dentro de su política de expansión, Forestalia está ultimando la selección de socios internacionales para su actividad en energía eólica. También desarrolla energía eléctrica fotovoltaica.
ENERGÍA MEDIANTE BIOMASA
La biomasa está considerada como una fuente de energía de largo recorrido futuro, con fuerte implantación en diversos países europeos, ya que su ciclo completo es neutro y de balance cero de CO2, algo crucial en la lucha frente al cambio climático, tal como obligan los tratados internacionales suscritos por España y Europa. Un reciente informe del Parlamento Europeo defiende incrementar el papel de la biomasa y los biocarburantes en el mix energético de los países de la Unión.
Las emisiones de CO2 de las plantas de biomasa, causadas por el combustible limpio y natural en la central, quedan compensadas con la capacidad de absorber las mismas cantidades de CO2 por parte de la biomasa utilizada.
La madurez tecnológica del sector permite unas energías renovables rentables y eficientes. Forestalia apuesta por un mercado abierto, competitivo, transparente, de menores costes, alta interconexión energética entre los países y, con todo ello, más beneficios en precios para el consumidor.