Ayer, Jueves 19 de enero de 2024, pronto por la mañana estábamos José Masgrau y yo conversando en una emisora de radio y al preguntarle el periodista qué había supuesto para él sus treinta y dos años en la presidencia de Montañeros de Aragón de Barbastro, José, siempre atinado, dijo que “media vida”, además de mostrarse muy satisfecho del “deber cumplido”. ¿Qué quería decir con esto?. Pues lo que viene repitiendo en sus últimas alocuciones y repitió al final de la tarde en su última Asamblea General de socios como presidente.
El deber cumplido ha sido para él y sus ocho equipos consecutivos de Junta Directiva el poder mantener la llama encendida del amor por las montañas. Una llama que comenzó a arder hace 75 años y sin duda recibimos como herencia de aquellas generaciones, de los cuatro presidentes anteriores a él que mantuvieron firme el pulso de un club deportivo, el más numeroso de la ciudad y que trasciende a su mera condición de asociación deportiva, pues en palabras de nuestro alcalde Fernando Torres somos toda una “institución social barbastrense”; no por casualidad englobamos casi un diez por ciento de su población.
Cuando intervine, apunté que para mí, más que media vida ha sido toda una vida la que me siento vinculado a Montañeros de Aragón.
Al igual que Leles Fábregas, recorriendo las fotografías de los 56 belenes celebrados por el Club nos veíamos en fotos de principios de los años setenta, es decir, hace cincuenta años.
¿-Acaso no es esto “toda una vida”?.
Toda una vida junto a personas veteranas que al principio, cuando éramos tan sólo adolescentes, educaban, formaban, tutelaban y cuando nos traspasaron la vara de mando sin duda fue José quien supo coger fuerte el timón para navegar con clarividencia en esa larga singladura en la que no faltaron momentos de zozobra a causa de las tragedias que la montaña a veces nos tiene reservadas. Sin embargo, después de tantos años el corazón devuelve recuerdos de momentos positivos y agradables; momentos de comunión y trabajo duro para conseguir grandes hitos en grandes eventos y cuando al menos yo terminaba mis palabras le decía a José GRACIAS por tantos años de amistad, de confianza en sus colaboradores y a la vez generosidad al otorgar plena libertad en la gestión de cada una de las vocalías.
Creo que todos comprenderéis que treinta y dos años es un período muy largo de tiempo y en él hemos mantenido un equilibrio y unidad de acción; siempre bajo la atenta mirada de quien nos ha guiado.
Hasta el último minuto y con la vista puesta en la recién elegida presidenta Ixeia Lacau, excelente capitana de su nueva Junta Directiva, José ha sabido colocar todas las piezas de un puzle compuesto por jóvenes y veteranos.
Ahí creo que está el éxito de los últimos años.
Unos años que al menos yo recordaré como los mejores de “toda una vida”.
2 comentarios
Faustino, gracias por tu apoyo y gracias porque, como el resto de la familia montañera, sabemos unirnos y disfrutar en cada excusión.
Las crónicas están escritas bajo un prisma muy personal pero iluminado por todos y cada uno de vosotros, los mejores compañeros de viaje.
Gracias por tus acertadas crónicas y está especialmente en la despedida de nuestro presidente y dando el relevo a esa nueva junta con Ixea al mando con todos sus colaboradores que aseguran la continuidad de nuestro club dotándolo de savia nueva
Felicidades Pedro.