Aunque ya lo tratamos hace algún tiempo, la cosa no mejora; así que hoy hablaremos de nuevo del empalagoso y abusivo verbo “producirse” que se lee y oye en cualquier periódico, telediario o noticiario (hasta con tintes de humor), y como siempre, sin intervención ni humana ni divina ni física o natural.
En general se refiere a aspectos muy negativos. Por tanto, “se producen” asesinatos y crímenes de todo tipo, atentados, violaciones, incendios, terremotos, erupciones volcánicas, ataques con drones, misiles (y otros), accidentes de cualquier clase, robos, timos y estafas, ciberataques…
Para dar el tiempo, también “se producen” los diversos fenómenos: Tormentas, lluvias torrenciales, fuertes rachas de viento, subidas (o bajadas) bruscas de temperatura, nevadas intensas, prolongadas olas de calor…, junto con los resultados que se deriven: inundaciones y desbordamientos de ríos, sequías, caídas de árboles, avalanchas, derrumbamientos de viviendas…
En el mundo de la política “se producen” inevitablemente votaciones, declaraciones (y reacciones a estas), congresos, juramento de la Constitución, debates de investidura (y otros), mociones de censura, manifestaciones y protestas, reuniones más o menos secretas, fotografías entre líderes…
En el mundo del deporte casi todas las violaciones a las reglas del juego también “se producen”: Faltas (en ataque, en el bloqueo), pasos, dobles, doble falta…; pero también rupturas de saque, rechaces, blocajes, despejes y remates, centros, goles…y (no falla) los inevitables cambios de jugadores / -as.
En las salidas de vacaciones y puentes, “se producen” también atascos y embotellamientos, desplazamientos, colas para sacar lotería, huelgas de pilotos o de taxistas o de maquinistas, aglomeraciones en centros comerciales, aeropuertos y estaciones de tren, playas o restaurantes…
Se trata de un verbo “comodín” que vale para todo sin calentarse la cabeza, ni probar a sustituirlo por otros como «originarse», «suceder», “ocurrir”, “ser”, “haber”, “celebrarse”, “tener lugar”…, o simplemente a no ponerlo (en no pocas ocasiones se trata de alargar de forma innecesaria la noticia), como vemos en estos ejemplos (quiten luego de leerlo el nauseabundo “…que se produzca…”, y vuelvan a leer la noticia): “Se espera que se produzca la comparecencia de Sánchez esta tarde a…”, o bien redactarla o decirla así: “Sánchez comparecerá esta tarde a…”. “Se producirán (“Habrá / tendremos”) fuertes lluvias por el noroeste de la Península”. “La reunión se producirá en Bélgica” (“Se reunirán en Bélgica”). “Se produce el cambio de Fulanito por Menganito” (“Fulanito entra o sustituye a Menganito”). «El accidente se produjo en…» («El accidente sucedió / ocurrió en…»).
Pero no, producirse y solo producirse. Producción de producciones, y todo producción.