Alma y corazón del Polifonik Sound
En la Semana Santa de 2008 nació en Barbastro, un festival de música independiente, con mucha ilusión y no tantos recursos. Las dos primeras ediciones se desarrollaron en las instalaciones de la Sociedad Mercantil y Artesana (S.M.A), hasta que en 2010, se trasladó definitivamente a la actual ubicación, el Recinto Ferial de Barbastro.
El festival ha ido creciendo edición a edición, a base del esfuerzo y dedicación de mucha gente, pero sin lugar a dudas, ha sido la perseverancia y empeño dos personas; los artífices de que aquel pequeño festival de la SMA se haya convertido en lo que es hoy el Polifonik Sound. Ellos son Luis Moya e Iván Arana.
Quién mejor para hablarnos del festival, su historia, sus momentos cumbre y sus momentos más ‘oscuros’ que los ‘padres de la criatura’.
¿Cómo surge la idea de montar un festival de música independiente en Barbastro?
Iván Arana: Todo fue muy de casualidad, tenemos que decir que “desgraciada” casualidad. Hace ya 12 años, la Asociación fundadora de todo esto, Peña QvoreK, sufrió un duro palo con la pérdida de uno de sus socios referentes. La pérdida de Raúl nos llevo a un duelo-homenaje que hizo posible, numerosos homenajes durante todo el año. Uno de esos fue intentar traer a nuestro local social alguna de las bandas noveles que estaban comenzando en Barbastro, teníamos un local grande y pensamos que éste podía ser uno de los grande homenajes; juntar a muchos amigos, realizar una gran fiesta, de uno o varios días consecutivos…
Durante las cuatro primeras ediciones, el festival tuvo lugar coincidiendo con la Semana Santa, y tras alguna fecha distinta, se ha instalado ¿definitivamente? a finales de junio, ¿habéis notado una mayor afluencia relacionada con la época del año en la que se programa el festival?
I.A: Creo que esa idea inicial de colocarnos en los días de Semana Santa, poco a poco, se demostró que era un “riesgo” poco recomendable. Ya no sólo por coincidir con unos días tan señalados, trabajados y cuidados en Barbastro en el espíritu cófrade sino que a nivel de climatología y producción conllevaba unos riesgos importantes. Muchas veces tienes que mirar alrededor a ver cómo se hacen las cosas… cuando te das cuenta que son días señalados para este sector (hasta que llegó el SanSan Festival, todo hay que decirlo) para intentar hacer un parón, descansar y tomar fuerzas para el verano que ser presenta.
Con el traslado de la SMA al Recinto ferial, incrementasteis considerablemente el aforo; habéis ido ‘expandiendo’ el alcance, pasando de un escenario a tener hasta cuatro en activo durante todo el fin de semana. Esto supone también una mayor oferta de opciones y por tanto, la posibilidad de acercarse a diferentes tipos de público ¿Cómo veis vosotros la evolución de público del festival desde las primeras ediciones hasta ahora?
I.A: El público cada vez es más diverso y heterogéneo la verdad. Tenemos un target que va desde los 20 hasta los 45 años por lo menos. Esto es muestra de la diversidad en la oferta, en la programación, en definitiva, en el producto que ofrecemos. Hemos conseguido poco a poco conquistar a un público local, quizás, no acostumbrado a este tipo de eventos y que ahora considera como suyo y hace gala de realizarse en su ciudad. Sin duda, para poder crecer y hacer un “festival” era básico trasladarse a un espacio como el Recinto Ferial. Como muchos dicen, envidia de otros muchos promotores poder contar con unas instalaciones así en Barbastro.
En 2011 a pesar de tener un gran cartel, las cosas no salieron como esperabais y abristeis las puertas con muy pocas entradas vendidas. ¿Qué es lo que os hizo seguir adelante y no tirar la toalla?
Luis Moya: Sinceramente no te lo sé decir…lo cuerdo hubiera sido plegar velas sin duda…pero aquel equipo (además de Iván y Luis aún estaban en la dirección Toni, Nestor y James) hizo un ejercicio de responsabilidad salvaje manteniendo el barco a flote y trabajando como locos. Movimos fechas y cambiamos el festival para poder tener a Love of Lesbian en 2012 con nosotros y hemos conseguido aguantar hasta hoy.
Un festival de estas características, manteniendo carteles de nivel, mejorando los servicios y la experiencia, innovando e introduciendo nuevas actividades, en definitiva, creciendo y mejorando año tras año sin apenas incrementar precios, se podría decir que es casi un milagro. ¿Cuál es el secreto?
L.M. El secreto es que PolifoniK Sound se hace por y para disfrutar de la música…un año de trabajo de un equipo que no tiene un sueldo por ello y lo único a lo que aspira es a no pillarse los dedos y que la gente disfrute al máximo. Si PolifoniK fuera una empresa no existiría porque no tiene sentido económico. Es un festival sostenible que se mantiene por hacer las cosas con cabeza pero que en cualquier capital de provincia congregaría a muchísima más gente.
Hablando de carteles de nivel, cada año tenemos la suerte de contar con bandas consolidadas del panorama independiente nacional pero también con grupos emergentes, ¿quién se encarga de la programación? ¿Tenéis en cuenta la opinión de los fans a la hora de configurar el cartel? ¿Qué criterios seguís?
L.M. Aunque en esta casa todo se hace en base al consenso, Luis tiene un mayor peso en la parte artística y seguimos una filosofía muy clara…apoyo a la escena local (en la medida que podemos), bandas increíbles que aún no tienen el apoyo del gran público y algún cabeza de cartel que nos permita vender abonos y sobrevivir.
¿Cuál es la actuación o momento del festival que más os ha emocionado?
L.M. Sin duda la actuación de Standstill en el 2011…éramos 400 personas y habíamos perdido un dineral, pero allí todo el mundo se sabía las canciones. Recuerdo como si fuera hoy abrir los ojos y ver a Rafa Angulo cantando a “grito pelao”, el abrió los ojos y nos sonreímos con felicidad. Aquella edición fue tan dolorosa como bonita.
Esta tarde comienza el festival, un año tremendo de trabajo, por fin, verá sus frutos recogidos. ¿Cuántas personas trabajan para que cada edición del Polifonik Sound sea un éxito?
L.M. Durante todo el año somos Ivan y Luis más Elena que es nuestra cabeza pensante en las redes sociales. Solo 3 personas que se dice rápido y que obviamente tienen sus trabajos a parte para poder pagar las hipotecas! En los días del festival seremos unos 100 entre unas cosas y otras dando forma al festival entero.
¿Qué pensáis, qué se siente, en los minutos previos a la apertura de las puertas?
Iván Arana Previo abrir puertas siempre piensas que falta algo, que hay cosas sin terminar, etc… es normal, son muchas cosas que controlar y que ajustar pero por suerte tenemos un gran equipo que hace las cosas muy fáciles y que cada año son mucho más independientes y saben perfectamente que es lo mejor y como tienen que hacerlo para arrancar de la mejor manera y sorprender a nuestro público.
¿Y cuándo os levantáis el domingo por la mañana?
I.A. El domingo por la mañana, intentar coger aire y leer todo lo que se cuenta, que si es como el año pasado, en mucho y muy bueno (esperemos que este año también).
Para finalizar ¿qué le diríais a alguien que no ha estado nunca en el Polifonik para que venga?
I.A. Yo siempre digo y así lo he vivido muchas veces, que vengan y prueben, no hacemos nada extraño o algo que sea de otro planeta. Ofrecemos un evento de música, cómoda, de calidad y un ambiente que te envuelve enseguida. Todos conoces alguien que ha probado por primera vez, se ha sorprendido y ahora es público fiel… por algo será.
Muchas gracias Iván, Luis, por hacer que el Polifonik Sound sea posible.
Y hasta aquí la serie dedicada al Polifonik Sound, espero que os haya gustado y ¡muchas gracias a todos por leerlo! Espero veros a todos en el recinto ferial disfrutando como enanos de este maravilloso festival que tenemos en Barbastro.
Si te has perdido alguna entrega, te dejamos aquí los enlaces:
Hablando del Polifonik con… PECKER
Hablando del Polifonik con… LA HABITACIÓN ROJA
Hablando del Polifonik con… GRISES
Hablando del Polifonik con… CARLOS SADNESS