Los oleicultores de Salas Altas volverán a molturar sus olivas y hacer su aceite en este pueblo del Somontano. Los componentes de la antigua sociedad «La Unión» han decidido rehabilitar la antigua almazara y ponerla en funcionamiento tras unos años sin actividad por falta de personal y adecuación a las nuevas exigencias de producción.
«Esto se iba a quedar totalmente paralizado y entre un grupo decidimos tirar adelante para dar salida a la aceituna que teníamos en el pueblo y para que de otros pueblos puedan traer aquí sus aceitunas», explica José Raso, miembro de la junta directiva.
La restauración de esta almazara ha supuesto una inversión de 220.000 euros, sufragados con ayudas de la DPH, el Centro de Desarrollo del Somontano a través de los fondos europeos Leader y la aportación de los más de cincuenta socios de Salas Altas. Desde esta sociedad esperan que una vez puesta en servicio, el número de asociados de este municipio aumenten, dado que el cultivo del olivo ha sido mayoritario en este pueblo durante siglos.
La sociedad «La Unión» se fundó a principios de los años 40 y llegó a tener 180 socios. Salas Altas llegó a contar con dos molinos pero con la creación de «La Unión» se decidieron unificar para conseguir mayor rendimiento. En esos años se molían las olivas en dos turnos, mañana y noche, durante un periodo de más de dos meses, llegando a obtener una producción de 8.000 kilos de olivas diarios.
Joaquín Sánchez recuerda como el aceite de Salas Altas «era muy cotizados y querido por los familiares. Se realizaba con esteras y tenía un sabor que gustaba a todos. Pero se ha ido perdiendo y por no cumplir las normas de sanidad se tuvo que cerrar».
Los oleicultores de Salas Altas e impulsores de esta iniciativa mostraban su satisfacción el pasado domingo durante la jornada de puertas abiertas en la almazara ya que han conseguido recuperar uno de los activos del municipio durante buena parte del pasado siglo. «Es muy bonito ver cómo ha quedado y lo contenta que está la gente», explica Joaquín Sánchez.
La almazara cuenta con la antigua maquinaria como dos prensas de libra, una bomba y los molientes que se ha restaurado para su exposición. Asimismo se ha adquirido nueva infraestructura y se ha adaptado la producción a los nuevos requisitos sanitarios. La parte superior de la almazara se destinará a local social para el municipio.
Salas Altas cuenta con cerca de 4.600 olivos, pero se siguen realizando nuevas plantaciones. La producción estimada para esta primera cosecha no será muy abultada dado que el pasado invierno no hubo lluvias. Las estimaciones rondarán de los 60.000 a los 90.000 kilos de aceitunas.
Este lunes la almazara «La Unión» realizaba su primera molturación de la cual se extraerá el primer aceite de una nueva etapa.
Salas Altas se suma a un puñado de poblaciones del Somontano que en los últimos años han rehabilitado sus antiguas almazaras, algunas como espacios museísticos -es el caso de Salas Bajas y Buera- y otras para recuperar la actividad como Adahuesca. Asimismo, Abiego está buscando subvención para recuperar su monumental almazara y transformarla en un espacio etnológico.