La necesidad de escribir, reconocida por Sol Otto Oliván, doctora en derecho, abogada y profesora de Derecho Constitucional en el Centro de la UNED, ha impulsado su primera novela La vida de Ángela (Rasmia) que ha tenido muy buena acogida entre los lectores.
Sol Otto
La autora barbastrense ha publicado con antelación La tutela del Rey menor en la constitución de 1978 (Aula Abierta), Voces Nuevas, VIII selección de poetisas (Torremozas), Trayecto contiguo, última poesía (Betania) y Cuentos para soñar. Además, de ensayos, artículos y colaboraciones en medios y revistas.
En la novela de 303 páginas, narra la vida de Ángela que transcurre en el Aragón de 1956, desde su pueblo en la montaña hasta una pequeña ciudad. Sol Otto lo cuenta con la prosa propia de una autora que cree “en el valor de la palabra escrita, en su fuerza y en su belleza. La palabra es un arma valiosa. Escribir ha sido para mí necesario, aunque tuviera otras ocupaciones”.
¿Por qué ha escrito esta novela?… “es difícil dar una respuesta, no sabría decirlo, te pones a escribir, a veces salen cosas y otras, al revés, no sale nada. Aquí salió una historia próxima a los lectores, pretensión inicial de alguien a quien le gusta escribir. Primero, escribir para uno mismo y luego que, si la publicas, sea fácil de leer, que no sea complicada. Al menos desde mi punto de vista. La novela tiene bastantes lecturas, además de la primera que se intuye”.
En este sentido, “en la vida de Ángela se refleja la de muchas mujeres y de otras que no tienen nada que ver, aparte de bastantes reflexiones sobre lo efímero de la vida humana, entra otras que despertaran el interés de los lectores. Al igual que Ángela puede haber muchas mujeres como ella y en ese sentido hay una inspiración de mi madre Amalia, natural del Valle de Rodellar, donde vivió hasta su traslado a Barbastro”.
Sol Otto es autora del poema A mi madre, tan valiente editado en 2012 por el Ayuntamiento de Bierge en la colección del Centro de Educación de Adultos “Somontano de Barbastro” por el Grupo de Patrimonio del Valle de Rodellar. En opinión de la autora, “escribir forma parte de mi vida, no me recuerdo sin ese deseo que, tal vez, sea una necesidad. Rafael Chirbes, escritor y crítico literario, dice que escribir es mucho más, meterse en el barro de las letras, recogerlas, limpiarlas, darles vuelta, pulirlas y quien aspira a serlo debe meterse a fondo. La predisposición, sólo, no vale”.
Al mismo tiempo, “creo en el valor de la palabra escrita y aunque se escribe mucho, no se ama la palabra suficiente para atreverse a escribir. Se puede ser dura, pero no hiriente porque hay muchas armas para decir las cosas sin faltar. La palabra se debe utilizar mejor”.
La novela refleja la fluidez cercana y necesaria para una lectura asequible, sin prisas y con el interés necesario hasta llegar al final de la vida de Ángela que describe la historia propia de una mujer corriente, “rinde homenaje al coraje y esfuerzo de muchas mujeres que lucharon a su modo por labrarse un futuro para ellas y sus familias”.