Cuando se adopta, recoge o se compra un animal para tenerlo de mascota se adquieren una serie de privilegios que no se pueden obtener con ninguna otra acción. Los beneficios están claros y son conocidos por todos; la compañía de un amigo siempre fiel, la mejora inmediata del estado de ánimo y de la salud… pero también se debe ser consciente de la responsabilidad que conlleva, un compromiso que lejos de ser una carga, si el amor por el animal es verdadero, será un placer más que añadir al privilegio de tener una mascota en casa
Como mínimo una mascota debe recibir una serie de cuidados para que tenga una vida digna en compañía de su familia humana. El animal que viva compartiendo un hogar deberá recibir respeto y cariño, protección, un lugar seguro donde protegerse del calor, del frío y de la lluvia. Por supuesto, siempre tendrá comida y bebida, y la higiene suficiente para que no sufra el ataque de ningún parásito.
Por otro lado, no hay que olvidar que, como norma general, necesitan ejercitarse, por lo que se le debe procurar un entorno donde pueda moverse con cierta libertad, adecuado a su raza, tamaño, edad… además deberán llevarse a cabo, de forma periódica y rutinaria, las visitas al veterinario.
La información, el primer paso para el cuidado de una mascota
El cuidado de un animal doméstico requiere de un principio fundamental por parte de su propietario, la información. El dueño de una mascota debe tener conocimiento de todas las necesidades, características y particularidades que su compañero requiere para tener una buena calidad de vida.
Afortunadamente, existen páginas webs, como saludhuellitas, todo un referente en información útil, actualizada y escrita por profesionales del sector, para los cuidados de las mascotas y otros animales. En este site se localizan artículos de gran calidad literaria, con profusión de datos y curiosidades que servirán a los cuidadores de guía para saber cómo se debe actuar para que la mascota pueda disfrutar de la compañía del humano.
Y es que tener un animal de compañía debe considerarse como una transacción constante, un quid pro quo en el que las personas reciben el cariño, la confianza y la alegría que aporta un animal, y la mascota, entre otras cosas, también debe recibir amor, protección y cuidados.
Además de cubrir sus necesidades básicas, el propietario de un animal deberá conocer y prevenir las enfermedades más comunes con las que se pueden ver afectadas sus mascotas. Una información que puede completarse visitando la página web antes mencionada de saludhuellitas.com, donde se presentan artículos tan interesantes como saber la esperanza de vida de un perro enfermo conla leishmania o con la tiña en los gatos, etc.
A continuación, se van a ofrecer una breve lista de las que habitualmente afectan a los perros y a los gatos, las dos mascotas preferidas en los hogares españoles.
Enfermedades comunes en los perros
Los animales domésticos, como los perros, ya sea por su cambio de hábitat, costumbres salvajes o por la obligación de mantenerlos según las costumbres humanas están sometidos a una presión excesiva en relación a su sistema inmunológico. Los perros, al igual que las personas, pueden ponerse enfermos, ser tratados, y curados. Así mismo, también puede evitarse la mayoría de las enfermedades con un buen sistema de prevención o, en cada caso, minimizar los efectos.
El moquillo
La más popular de todas es una enfermedad considerada como altamente contagiosa. El motivo de su elevada peligrosidad de infección es que se trata de un virus muy parecido al sarampión humano. Se trata con antibióticos y líquidos con los que evitar la deshidratación, aunque la mejor acción será la vacunación, que evitará que contraigan este mal casi en un 100 %.
La hepatitis canina
Otra de las enfermedades más contagiosas que pueden sufrir los canes. Este mal viene causado por el adenovirus tipo I, una variedad que se libera en sus deposiciones fecales. Hay que vigilar estos excrementos, puesto que quien la padece puede llegar a ser hospitalizado en los casos más graves.
La Leptospirosis
La bacteria espiroqueta es la que causa esta enfermedad a través de la orina, entrando en el organismo del animal por una herida en su piel o por contacto directo con una orina ya infectada. Su cura se centra en tratamientos con pelicilina y estreptomicina, es decir, con antibióticos.
Otras enfermedades comunes en los perros son el Parvovirus, la Rabia, la Brucelosis, la Borreliosis canina o enfermedad de Lyme, la Traqueobronquitis infecciosa o tos de la perrera, entre otros.
Enfermedades comunes en los gatos
Aparentemente, los gatos son más resistentes a las enfermedades que sus compañeros los perros, por lo que son menos propensos a las visitas al veterinario. Esta salud puede deberse a que la mayoría de ellos, cuando son domésticos, no suelen salir de sus viviendas y tienen poco o ningún contacto con otros de su especie. En cualquier caso, hay que controlarlos y observar si padece alguna de las enfermedades más comunes.
La otitis
Esta inflamación del conducto auditivo es bastante común en los gatos. En los casos más extremos son dolorosas y pueden llegar a perder la audición. Es una enfermedad producida por la acción de cierto tipo de ácaros y otros parásitos. Hay que vigilar cómo y cuántas veces se arrasca la oreja y llevarlo al veterinario.
La conjuntivitis
Los ojos son, posiblemente, la parte más delicada de estos animales, por lo que la conjuntivitis es muy frecuente en los gatos. No se trata más que de una inflamación en la mucosa del ojo, pero si no se detecta a tiempo, puede llegar a perder la vista. Hay que vigilar un exceso de lagrimeo y / o legaña.
Otras enfermedades habituales en los gatos son la rabia, la leucemia felina, la panleucopenia felina, la peritonitis, la inmunodeficiencia felina, la cistitis…